Las inspecciones automotrices son complejas debido a las estructuras grandes y compuestas de los automóviles, como también a la ubicación de los componentes clave (p.ej., en el fondo de un motor). Los videoscopios son idóneos para las inspecciones que se ejecutan en la fabricación, el control de calidad y la I + D de automoción. Evitan el desmontaje de los componentes, ya que proporcionan imágenes claras a partir de áreas de difícil acceso y facilitan de esta manera la detección de defectos.
En la industria automotriz, el valor de los automóviles se determina en gran medida por la calidad individual de los componentes. Cada componente presenta fallas o defectos específicos, así como imperfecciones potenciales. Por ende, las tecnologías de inspección deben ser versátiles para detectar fallas o defectos bajo diversas condiciones de iluminación y a través de puntos de acceso de variadas dimensiones. El desmantelamiento o el ensayo destructivo de piezas o componentes específicos acarrea pérdidas de tiempo y dinero. La inspección visual remota (RVI) permite que el alcance del ojo humano llegue hasta áreas que de otro modo serían inaccesibles, lo que posibilita la detección de defectos con claridad por parte de los inspectores, incluso en lugares de difícil acceso dentro de un automóvil o motor. La última generación de instrumentos RVI, como el videoscopio IPLEX GX/GT, alberga una cámara de diámetro pequeño cuya conducción por parte del inspector a través de aberturas angostas facilita la captura de imágenes sin necesidad de un desmantelamiento. Esta técnica ayuda a ahorrar tiempo y asegura la fiabilidad de las inspecciones mediante imágenes de alta calidad. |  Figura 1: Inspeccionar las camisas de agua de los motores de automóviles es una aplicación común que se lleva a cabo con los videoscopios industriales. |
Ejemplo de aplicación: Inspección de durabilidad en I + D llevada a cabo en motores de prueba de un importante fabricante de equipos originales (OEM)
Los ingenieros de investigación y desarrollo (I + D), de uno de los principales fabricantes de equipos originales (OEM) de la industria automotriz en Alemania, probaron el nuevo IPLEX GX para inspeccionar motores después de múltiples ensayos. El ensayo típico consistía en un motor a funcionamiento continuo durante la noche, seguido de una inspección videoscópica en las culatas, camisas, pistones, sistema de escape y otras áreas clave. Durante la inspección, los ingenieros buscaron fallas/defectos, como acumulaciones de carbón, desalineación, rasguños, fugas y desgaste. Con el IPLEX GX, los ingenieros pudieron obtener imágenes claras del interior del motor (Figura 2). El equipo de I + D quedó impresionado con la calidad de las imágenes producidas por el IPLEX GX y comentó que «[este videoscopio] brindó una excelente calidad de imagen por medio de una sonda de diámetro pequeño de 4 mm — específicamente—, más un rendimiento absolutamente idóneo para un rango de enfoque cercano de 2 a 200 mm». Asimismo, se valoró en particular la facilidad de uso del videoscopio: «El IPLEX GX es muy compacto e intuitivo, lo que ha hecho fácil su uso. La articulación eléctrica y la operación del mando, sin tener que soltar el freno, aceleraron los ajustes y la transferencia de imágenes a una pantalla de PC o tableta, y [esto es todo un] beneficio». Ambos factores aumentan la eficiencia de la inspección. |  Figura 2: Ejemplo de una acumulación de carbón en la válvula del motor, vista a través del IPLEX GX empleando un adaptador de punta de enfoque cercano de 4 mm por visión directa a 120°. |
Reducir las paradas
Al elegir un videoscopio para fabricantes de equipos originales (OEM) de automóviles y otras industrias manufactureras, es importante seleccionar un dispositivo que sea adecuado para la gama más amplia de inspecciones y preserve el mayor tiempo de actividad posible. Estos aspectos tienen efectos sustanciales, tanto a nivel de la fiabilidad como del retorno de la inversión.
Las unidades de sonda intercambiables contribuyen al mantenimiento del tiempo de actividad como a la versatilidad. El videoscopio IPLEX GX/GT presenta sondas intercambiables y duraderas de 4 mm y 6 mm de diámetro, dotas de un revestimiento externo en tungsteno para sus diversas longitudes de alcance —desde 2 m hasta 10 m. Esta variedad permite que un sistema modular lleve a cabo una multitud de tareas, y reduce en particular tanto el costo (Esp. coste) de capital inicial como el completo costo (Esp. coste) de propiedad.
Puesto que los videoscopios necesitan un mantenimiento regular en aplicaciones de uso intenso, la disponibilidad de más de un videoscopio también significa la progresión ininterrumpida de las inspecciones mientras se hace el mantenimiento de un videoscopio.
Probabilidad de detección (POD) optimizada
La probabilidad de detección es otro parámetro clave para determinar el valor del instrumento de inspección. Tanto la articulación de la punta de la sonda como la calidad de los videos y las imágenes precisan la probabilidad de que se detecte una falla.
El videoscopio IPLEX GX/GT integra la avanzada articulación TrueFeel, la cual mantiene la especificación angular, incluso después de varios giros de 90 grados. Esta tecnología permite que todas las superficies de un componente se proyecten de forma clara, incluso al tener un solo punto de entrada. Por otra parte, la iluminación brillante, la grabación de videos a 60 FPS y el amplio campo de visión también brindan una calidad de imagen superior, lo que facilita una toma de decisiones rápida y bien sustentada.
Operación intuitiva y cómoda
En el caso de inspecciones de alto rendimiento, como el control de calidad en la fabricación de automóviles, la facilidad de uso de un videoscopio no solo contribuye en gran medida a la comodidad del usuario, sino también a la rapidez de las inspecciones. El funcionamiento intuitivo, el procesamiento de imágenes y la documentación previenen retrasos en la inspección, el análisis y la generación de informes. Cabe agregar que el software de asistencia de inspección InHelp es suministrado de serie en todos los videoscopios IPLEX GX/GT para reducir el tiempo de inspección, simplificar la gestión de imágenes y agilizar la generación de informes.
Resumen
La inspección visual remota (RVI) es una técnica rápida y fiable, usada frecuentemente para inspeccionar los componentes de automoción con el máximo detalle. Por su parte, el videoscopio IPLEX GX/GT de Olympus es una herramienta valiosa en la industria automotriz debido a su capacidad para reducir las paradas, permitir un funcionamiento sencillo y proporcionar imágenes de excelente calidad, además de datos cruciales en la investigación y desarrollo (I + D) de automoción, así como en las inspecciones de fabricación y control de calidad.
